Ella siempre fue muy jovial y para encarnar a Sofía, el personaje que le tocó interpretar en Tratame bien, encontró un look que la hace ver como una madre de hijos adolescentes, pero sin perder su esencia.
Lo más notorio a la hora de verla en escena es su peinado. Si bien mantiene su típico color rubio, esta vez optó por un corte bien de “madre”, con brushing incluido. La hace ver madura y se acomoda perfectamente a como el público se imaginaría físicamente a Sofía sin haber tenido la chance de verla.
A la hora de vestir, opta por colores bien clásicos y telas súper cómodas, como lino, algodón y gabardina. Siempre se la ve en pantalones y aunque usa un hermoso vestido azul para la gráfica de la ficción, durante las escenas se limita a esa prenda. Camisas, remeras y saquitos al tono acompañan el vestuario y para rematar, suele usar sacos por la rodilla que le dan un toque súper chic e inconfundible.
A sus pies, botas y zapatos bien finos y de calidad. Su look en general es formal. Nunca se la ve cómoda -en jogging o jeans- salvo en alguna que otra escena en la que se la muestra de entre casa y por la noche.
El maquillaje es perfecto. No abusa de los colores y usa sólo lo suficiente para verse bien en cámara. Es que sigue manteniendo esa cara de nena que la hizo famosa. Cecilia es una de esas actrices para las que el paso del tiempo no cuenta.
Cecilia Roth se ve tal como debería verse Sofía. No se pasa ni un milímetro más de lo que debería ser. Su actuación es maravillosa y la composición desde el vestuario completa el combo. Una vez más, un caso en el que se demuestra que un personaje no sólo se construye desde el talento, sino también desde el look.
Lo más notorio a la hora de verla en escena es su peinado. Si bien mantiene su típico color rubio, esta vez optó por un corte bien de “madre”, con brushing incluido. La hace ver madura y se acomoda perfectamente a como el público se imaginaría físicamente a Sofía sin haber tenido la chance de verla.
A la hora de vestir, opta por colores bien clásicos y telas súper cómodas, como lino, algodón y gabardina. Siempre se la ve en pantalones y aunque usa un hermoso vestido azul para la gráfica de la ficción, durante las escenas se limita a esa prenda. Camisas, remeras y saquitos al tono acompañan el vestuario y para rematar, suele usar sacos por la rodilla que le dan un toque súper chic e inconfundible.
A sus pies, botas y zapatos bien finos y de calidad. Su look en general es formal. Nunca se la ve cómoda -en jogging o jeans- salvo en alguna que otra escena en la que se la muestra de entre casa y por la noche.
El maquillaje es perfecto. No abusa de los colores y usa sólo lo suficiente para verse bien en cámara. Es que sigue manteniendo esa cara de nena que la hizo famosa. Cecilia es una de esas actrices para las que el paso del tiempo no cuenta.
Cecilia Roth se ve tal como debería verse Sofía. No se pasa ni un milímetro más de lo que debería ser. Su actuación es maravillosa y la composición desde el vestuario completa el combo. Una vez más, un caso en el que se demuestra que un personaje no sólo se construye desde el talento, sino también desde el look.
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